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Opinión

El cántico de los barrios

La quinta es un lugar de ensueño. Un encuentro real con la naturaleza. El bullicio de los pibes se asocia al gorjeo de los pájaros. Afuera los animales se regodean en su hábitat cómodo, y adentro de la edificación, una familia unida en pos de un objetivo: tender una mano y conjugar un sueño.

La Asociación Benéfica “Sumando Sonrisas” la viene llevando adelante con pasión, con fervor, con auténtico ahínco, a esta tarea de hermanar a los barrios, y, por ende, hacer de toda la ciudad, una sola camiseta.

Y aquí están, entonces, ellos: los referentes del Grupo, con los papás de varios chicos y los protagonistas principales de esta cruzada: la niñez y la juventud con ganas de mostrarse en sociedad, con ímpetu para desarrollar un talento que les viene de cuna: cantar.

La gente de la Agrupación avala este ideario. Porque tal criterio sirve para derribar barreras hostiles y purificar prejuicios innecesarios. Sólo basta conocer a los purretes, para quedar sujeto a sus risas y melodías. Un magnífico universo por explorar. Y tantas ocasiones discriminado por pura ignorancia.

InfoOlavarría, entre mate y mate, conversó con la amplia camada de cantantes barriales de “Sumando Sonrisas”. Franco Rodríguez, 14 años, del “Nicolás Avellaneda”, en principio nos cuenta: “Yo hago rap. Me gusta mucho cantar para que se diviertan los niños y ayudar más que nada. Me siento cómo haciendo esto”.

Leonela Pereyra, es del mismo barrio. En su caso,  tiene 16 años y una dura historia de vida. “Estoy incorporándome al Grupo. Me gusta cantar melódico, temas de Abel Pintos por ejemplo y estoy muy contenta de poder ayudar con mi voz”.

Macarena Rodríguez, 17 años, es del barrio “La Araña”, y afirma sin rodeos: “Me va cantar folklore y cumbia. Mis ídolos son el Chaqueño Palavecino y Ramón Fernández en lo folklórico y en la cumbia Rocío Quiroz y Eugenia Quevedo. Arriba de los escenarios, me siento bien porque se observa la alegría de los chicos”.

Jonathan Rueda, 18 años, es del “Provincias Unidas” y se mueve en el terreno de “Los temas del recuerdo, Leonardo Favio, Los Ángeles Negros y también Leo Mattioli”. Pertenecer a esta propuesta, “te sirve para conocer gente nueva y hacer sociabilidad”, remarca el joven.

Emanuel Rodríguez, con 15 años, de “La Araña” ama el rap. “es muy encantador ver a los pibes entusiasmarse con mis temas. Es algo extraordinario”, reconoce el rapero. También forman parte del “staf” musical: Marilín Rodríguez, de 8 añitos y Roberto de barrio “El Progreso”, con 23 años de edad.

El dueño de casa es Víctor Hugo Rodríguez, extiende el mate cordial y se lo nota en su salsa. “Para mí es algo que quise hacer siempre. Así que haberme sumado al Grupo, significa un gran alegrón”. Con respecto a los purretes dice: “A ellos les encanta ensayar, buscar nuevos temas, poder cantar. Y que les dieran la oportunidad los impulsa cada día más”.

Andrea Coronel, por su parte, comanda los hilos de la nave solidaria y resume la actividad como: “Totalmente gratificante porque incluir a la juventud de esta forma, con mucha cultura y un ámbito sumamente agradable, nos llena de felicidad. Ver a los chicos de los barrios, presentes en distintos tipos de eventos, nos da fuerzas para continuar en esta senda”.

Y para culminar la nota recurrimos a Raúl Navilliat, piloto también de este avión que sobrevuela los rincones de Olavarría. Su reflexión apunta a admitir que: “Estos chicos son totalmente desprendidos. No cobran un peso. Les estamos enseñando, en un punto, lo que es la solidaridad con sus pares. Es lindísimo eso”.

Por Mario Delgado.-

 Farmacias de turno en Olavarría Facultad de Derecho