Opinión
Concejo Deliberante: de la Rendición, rendidos y desplazados
Suenas tristes acordes en el poder legislativo local, habida cuenta de un comunicado de prensa, expuesto en nota aparte en este portal, por el cual el bloque “Radicales Convergentes”, hace saber a la población en general, de la desafectación de la señora abogada Fernanda Araneo, ex edil por otra parte, del puesto de Subsecretaria del Cuerpo.
Ante tal significativo hecho, las averiguaciones hechas por quien esto suscribe, redundaron en la síntesis de dicha escueta nota, aunque pudimos acentuar la conmoción causada filas adentro de ese tándem, en el que milita la desplazada y la concejal Gabriela Delía, que dijo “no” al proyecto del Gobierno olavarriense, en cuanto a la Rendición de Cuentas reciente.
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No es un momento de elucubraciones banales o despectivas, es verdad. Y, pese al hermetismo que han decidido imponer las referentes políticas radicales convergentes, las aristas van saliendo, puntiagudas y ríspidas, y demuestran que algo sucede, algo que debe desde luego, ser desmenuzado con seriedad imparcial.
La culminación abrupta de las funciones de Araneo, representan en la práctica una ruptura del acuerdo de autoridades del HCD, pactado allá por diciembre del año pasado. O sea, hace relativamente poco.
En aquél armado, se concilió la entrada de Fernanda, como así con el eseverrismo, la de Gerardo Ripoll y Leandro Lanceta, éste como Secretario, al lado del señor Presidente Bruno Cenizo.
La marcha del motor se vio afectada en marzo y José Pablo Ávalos y Verónica Sánchez “volaron”, siendo sus sustitutos la doctora Mariana Catanzaro y Jorge Fariña. Se nombró además un empleado nuevo y Juan Dambolena tomó la responsabilidad del área de prensa deliberativa.
Pero volviendo al ruedo, el ítem pendular de la Rendición de Cuentas, en la maratónica tarde del lunes 28, derivó pues en situaciones interesantes. Hubo despliegues de la galería del Ejecutivo, tratando de convencer concejales, incluyendo llamados telefónicos de alto vuelo. Ardía el Palacio San Martín.
Algunos representantes del pueblo fueron convencidos y otros no. Un caso puntual retumba en la jornada actual. ¿La Rendición trajo rendidos? Es muy probable, puesto que en ciertos bloques, se notaba, siendo buen observador, el disgusto de unos en desmedro de sus compañeros.
Rivadavia y San Martín apostó fuerte, entonces. Tal instancia acarrea, a simple vista, rendidos y desplazados que tendrán, claro, que analizar ahora el modo de continuar en la senda.
El bloque oficialista, a su vez, no posee demasiado diálogo con las fuentes del poder central. Esto también es un dato a sopesar.
Por Mario Delgado.-
