La mayor\u00eda de las personas en confinamiento probablemente est\u00e9n experimentando grandes cambios en su rutina habitual. <\/strong>Los boliches y los bares permanecen cerrados, y las aventuras de una noche son pr\u00e1cticamente ilegales. No hay viajes de oficina, ni viajes de estudio; no hay fiestas a las que asistir, ni cenas grupales que planificar. No es sorprendente, entonces, que para muchas personas, esos cambios tambi\u00e9n puedan estar afectando su vida sexual.<\/strong><\/p>\n\n\n\n

Los Centros para el Control y la Prevenci\u00f3n de Enfermedades<\/strong> de los Estados Unidos recomiendan que las personas se mantengan al menos a 2 metros de distancia entre s\u00ed en todo momento<\/a>, a menos que vivan con una pareja o un familiar. Esa distancia ciertamentereduce la posibilidad de contacto f\u00edsico con un desconocido,<\/strong> lo que significa que las citas, casuales o no, est\u00e1n en espera indefinidamente para muchas personas en todo el mundo. Y dado que la investigaci\u00f3n ha demostrado que el tacto es beneficioso para nuestra salud f\u00edsica y mental<\/strong><\/a>,<\/strong> estas precauciones necesarias son frustrantes para aquellos que anhelan ese nivel de intimidad pero se les niega en nombre del bien com\u00fan.<\/p>\n\n\n\n