No sirven ya las ben\u00e9volas intenciones ni los cambios de Comisarios: nadie en su sano juicio, cree que mutar un Jefe de lugar, auspicie un mejoramiento de la candente realidad en esta materia.<\/p>\n

\u201cNo podemos venir a hablar con la gente sin respuestas\u201d, me confes\u00f3 cierta ocasi\u00f3n don Eduardo Sim\u00f3n, ex Subsecretario de Seguridad del Municipio de Olavarr\u00eda, luego de un encuentro con vecinos en un sector del partido muy convulcionado en ese instante preciso. Y agreg\u00f3 sin tapujos en sinton\u00eda con lo anterior: \u201cFalta compromiso policial\u201d.<\/p>\n

Quien mejor que \u00e9l y su asesor y acompa\u00f1ante en estas lides, don Ra\u00fal Borra, para saber de primera mano, cual es el dilema vern\u00e1culo en directa relaci\u00f3n a la falta de sosiego para la vecindad.<\/p>\n

Si hab\u00eda planes concretos de lograr una comunidad abstra\u00edda del delito, no se conquist\u00f3 a\u00fan esa cima. Es un podio en rigor de verdad extremadamente lejano.<\/p>\n

Dar la cara fue su impronta, llegando en su moto a sendas reuniones y exponiendo las razones que sosten\u00eda convenientes para acercar el barco a las aguas de la mansedumbre.<\/p>\n

Su popularidad se torn\u00f3 discutida hace un a\u00f1o atr\u00e1s, con lo del \u201cIndio\u201d, \u00bfse acuerdan, queridos amigos? Sim\u00f3n condujo cual h\u00e9roe de pel\u00edculas de acci\u00f3n, un cami\u00f3n de la Comuna transportando fans varados en la Terminal de \u00d3mnibus.<\/p>\n

La perspectiva era, en aquel tiempo aciago, llevarlos hacia la localidad de Azul, o por lo menos dejarlos medio cerca. Esa foto traspas\u00f3 la barrera nativa y se extendi\u00f3 por las venas nacionales.<\/p>\n

Surgieron diversos rumores sobre su pronto alejamiento por tal actitud temeraria. \u201cIban como ganados\u201d, dir\u00edan algunos desde la atalaya opositora, aprovechando la ca\u00f3tica instancia.<\/p>\n

Sin embargo, Eduardo permaneci\u00f3 firme, pese a la andanada de cr\u00edticas y pese incluso a ver pasar a su lado, a varios \u201cfusibles\u201d que saltaron sin atenuantes por la coyuntura del evento tan multitudinario y fatal por las muertes acaecidas.<\/p>\n

Viniendo m\u00e1s ac\u00e1 en la sucesi\u00f3n de hechos, el s\u00faper incendio del Dep\u00f3sito Judicial de autos y motos, cuesti\u00f3n que todav\u00eda se investiga con premura, salpic\u00f3 de cierta forma al funcionario porque justamente por esas horas, se labraban tit\u00e1nicas sospechas de corrupci\u00f3n y connivencia, entre talleritas, algunos servidores del orden, y dem\u00e1s componentes del entramado, luego de denuncias puntuales de personas que se encontraron con sus veh\u00edculos desguazados, o con llamativos faltantes de algunas partes. Pero si hasta plantas de marihuana creciendo libres, se hallaban por ese recinto norte\u00f1o.<\/p>\n

El trago amargo debi\u00f3 mellar confianzas y convicciones. \u00bfQui\u00e9n se comi\u00f3 con satisfacci\u00f3n la tesis del pibe aburrido que prende un fueguito para alegrarse el domingo de carnaval?<\/p>\n

En medio de una comarca que padece m\u00e1s casos de inseguridad de los que se divulgan, con arrebatos y asaltos por doquier y a toda hora, en medio de jerarqu\u00edas uniformadas que se reemplazan con suma facilidad y demasiada asiduidad, en medio de un comercio \u201cal menudeo\u201d de drogas que alarma, con varios vendedores de sustancias que a su vez, cobran planes estatales, en el colmo de la burla al sentido com\u00fan, en este contexto se va Eduardo Sim\u00f3n, el hombre que reconoci\u00f3 ante este cronista que: \u201cNo sirve hablar y hablar con la gente, si no le das respuestas precisas\u201d.<\/p>\n

Por Mario Delgado<\/strong>.-<\/p>\n