Este lunes, cuando se llega al aniversario de la detención por una ‘contravención’, habrá una protesta en la Plaza Pedro Pereyra de Laprida, que se reiterará el día sábado. Comunicado de los familiares de Daiana.

La convocatoria es abierta a organizaciones de Derechos Humanos, activistas independientes, partidos políticos, y a toda aquella persona que quiera acompañar el pedido de Verdad y Justicia. En este sentido, además de las movilizaciones, se invita a participar en la realización de un mural que se pintará en los próximos días.

La concentración para marchar el 5/6 será en la Plaza Pedro Pereyra a partir de las 16 hs. En tanto, el día 10/6 la cita es en el mismo lugar pero desde la mañana y estarán presentes familiares y amigxs de Daiana provenientes de la ciudad de La Plata.

Daiana tenía 26 años, era una joven muy alegre, le gustaba salir, compartir con amigos, jugar al fútbol los fines de semana junto a sus amigas. También le gustaba salir de paseo junto a su pequeño hijo, a quien soñaba con verlo crecer y contribuir para que él sea tan feliz como lo era ella.

Una noche como tantas otras Daiana salió a divertirse, pero a la salida del boliche, en la madrugada del 5 de junio de 2022, fue detenida por la policía bonaerense por una “contravención”. Fue llevada a la comisaría donde estuvo detenida, alojada en un calabozo. Allí la humillaron, la golpearon y torturaron hasta matarla. Fueron cinco los policías responsables de su muerte: Vanesa Núñez, Pamela Di Bin, Juliana Zelaya, Adrián Núñez y Leandro Furh; quienes, además, con la complicidad de la cúpula policial y la Ayudantía Fiscal montaron una escena en la comisaría para hacer pasar el asesinato de Daiana como un supuesto suicidio.

Daiana era una persona llena de sueños y proyectos a la que le arrebataron injustamente la vida. El accionar criminal que tuvieron los efectivos policiales se intenta encubrir desde hace un año por el poder político y judicial. Por un lado, desde el gobierno municipal y provincial, jamás cuestionaron el accionar policial y, en cambio, se dedicaron a defenderlo públicamente ante el repudio de la gente. El Ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni, incluso, pagó con el presupuesto estatal abogados defensores para los policías acusados. El intendente Pablo Torres, por su parte, en todo momento se desentendió de cualquier tipo de responsabilidad política ante lo sucedido y, en un primer momento, no dudó en defender la versión del suicidio. Versión que no sólo encubre la verdad y exculpa a la policía, sino que también dañan el honor y la memoria de Daiana.

Por otro lado, la justicia hizo su parte realizando una primera autopsia trucha para ocultar lo ocurrido, reforzar la hipótesis del suicidio en la causa judicial y dejar libres a los policías responsables. Luego, cuando la causa ya había cambiado de fiscal, gracias a la movilización popular y a que la familia de Daiana nunca bajó los brazos, se logró la realización de una segunda autopsia que permitió refutar la versión del suicidio y lograr la detención de los cinco policías. Sin embargo, para liberar a los policías acusados, al fiscal Calonge y a la Jueza de Garantías les bastó un informe preliminar de las dos autopsias (presentado mediáticamente como un supuesto informe final), solo firmado por la Policía Federal, sin ningún perito de parte presente. Sin dudas, lo ocurrido es el intento de la Policía Federal, a cargo del Ministro de Seguridad de la Nación Aníbal Fernández, por encubrir la verdad de lo ocurrido y favorecer a la bonaerense.

La causa judicial, que actualmente aún se encuentra en la etapa de instrucción, atraviesa momentos de gran importancia ya que se aguarda por el informe de los peritos pertenecientes al Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, el cual podría incidir en la carátula de la causa cuando sea elevada a juicio.

El asesinato de Daiana en manos de la policía bonaerense no es un hecho aislado, tampoco es un suceso trágico e imprevisto en “un pueblo tranquilo”. La muerte de Daiana es un crimen contra la juventud y contra la comunidad lapridense en general, que desde el retorno a la democracia es sistemáticamente amedrentada y violentada por la fuerza policial. Prueba de ello son los numerosos testimonios, sobre todo de jóvenes, que se dieron a conocer luego de la muerte de Daiana, los cuales dan cuenta de incontables casos de abusos de autoridad, torturas y golpizas (dentro y fuera de la comisaria), cometidos por una policía que se cree “dueña de la ciudad”.

Sin dudas, el accionar policial forma parte de una política sistemática del estado represor y genocida, que lejos de “cuidar a la gente” le garantiza impunidad a la policía para secuestrar, torturar y asesinar a nuestros seres queridos. Daiana Abregú es otra víctima de las más de 8,700 personas asesinadas por las fuerzas represivas del estado en democracia. No permitamos más este atropello contra nuestras vidas, ni en Laprida, ni en ninguna otra parte.

Por todo esto, llamamos a reforzar la movilización el próximo lunes 5 y sábado 10 de junio ¡Seamos muchos en las calles pidiendo Verdad y Justicia por Daiana Soledad Abregú! ¡Que este crimen no quede impune!