Por octavo año consecutivo, el Grupo de lectura Escritores de Olavarría, dará comienzo a su actividad anual. La cita será para el día martes 28 de abril de 16 a 17.30, en la sede del Archivo Histórico Municipal, calle Lamadrid 2658. El taller contará con la habitual coordinación de la escritora Norma M. Guerra y las reuniones serán el último martes de cada mes.

Este espacio cultural dedicado a fomentar el hábito de la lectura en voz alta y a difundir la obra de distintos escritores, incluyendo a los autores  locales, es abierto, gratuito y quienes participen pueden compartir textos de autores de su preferencia o de propia autoría.

Para este primer taller se trabajará sobre la vida y obra de Florencio Sánchez y en la modalidad de teatro leído se abordará la pieza teatral corta, (sainete), El desalojo, escrita en 1906, en donde Florencio Sánchez hace una radiografía de una época, el 1900 y da cuenta de situación en que se encuentra una mujer ya madura, madre de varios hijos, que vive en un conventillo y se enfrenta al desalojo por no haber pagado el alquiler. Sus pertenencias están en el patio del conventillo (donde transcurre la escena) al haber sido desalojada de la pieza que ocupaba en él. Indalecia, personaje principal de la obra, casada con un hombre trabajador que ha sufrido un accidente, deberá buscar un trabajo para enfrentar la situación en la que está inmersa su familia. El personaje suscita la simpatía y compasión, por sus expresiones de apego hacia sus hijos, en el conflicto de no tener qué darles de comer, o separarse de ellos para que ingresen a un asilo o el mayor al cuartel, a fin de que ella tenga la posibilidad de ganar algún dinero trabajando.

Florencio Sánchez, dramaturgo uruguayo, fue uno de los fundadores del teatro rioplatense y autor de gran relevancia en la escena latinoamericana. Nacido en Montevideo, el 17 de enero de 1875, este autor fue cronista en La Voz del Pueblo, de Minas (1891) El Siglo y La Razón de Montevideo (1894), El Nacional (1897). En 1900, se vincula al ambiente intelectual bonaerense y hace crítica teatral en El País de Carlos Pellegrini. Tras varios viajes entre Montevideo y Buenos Aires, el 13 de agosto de 1903, la compañía de Jerónimo Podestá estrena, en el teatro de la Comedia, M’hijo el dotor. Ese es su primer gran éxito. También escribió -Cédulas de San Juan, La pobre gente, La gringa (1904), Barranca abajo, Mano Santa, En Familia, Los muertos (1905)- El desalojo (1906), Cartas de un flojo y El caudillaje criminal en América Latina, ensayo sobre la realidad política de nuestros países a comienzos de siglo. En 1907, inició en Montevideo las gestiones para realizar un viaje a Europa del que se esperaba la consagración definitiva de su teatro. Parte en 1909, con una misión oficial. Pronto se declara la tuberculosis y el 7 de noviembre, a las tres de la madrugada, muere en el hospital Fate Bene Fratelli de Milán.